¿Qué sucede con el tercio de libre disposición si no hay testamento?
Si no se hace testamento, el tercio de libre disposición pierde su carácter «libre». En este caso, se suma a los tercios de legítima y mejora y se reparte entre los herederos forzosos según las reglas de la sucesión intestada (herencia sin testamento). Esto significa que el testador pierde la oportunidad de decidir sobre esta parte de su patrimonio.
¿A quién puedes dejar el tercio de libre disposición?
El testador tiene plena libertad para decidir el destino de esta parte de su herencia. Algunas opciones comunes incluyen:
- Familiares que no sean herederos forzosos, como sobrinos o primos.
- Amigos cercanos, que podrían no tener derecho a recibir herencia en condiciones normales.
- Organizaciones benéficas o religiosas, como ONG, iglesias o asociaciones culturales.
- Causas personales, como ayudar a una persona en situación de necesidad o donar a una asociación animalista, por ejemplo, «la asociación de gatos del barrio».
La importancia del testamento en el tercio de libre disposición
El testamento es el único documento que permite ejercer el control sobre el tercio de libre disposición. Sin un testamento, la ley no permite al testador destinar esta parte de la herencia según sus deseos personales. Por lo tanto, redactar un testamento no solo garantiza la tranquilidad de que tus bienes se distribuirán como prefieres, sino que también permite aprovechar al máximo esta herramienta legal.
Consejos prácticos para aprovechar el tercio de libre disposición
- Evalúa tus relaciones y prioridades: Piensa en personas o instituciones que te gustaría beneficiar más allá de los herederos forzosos.
- Consulta a un abogado especializado: Un profesional puede orientarte sobre las mejores estrategias para distribuir tu patrimonio respetando la ley.
- Actualiza tu testamento: Si tus circunstancias personales cambian (nacimiento de hijos, matrimonio, divorcio, etc.), es importante revisar tu testamento para asegurarte de que refleja tus deseos actuales.
- Considera causas benéficas: Si no tienes familiares o personas específicas a quienes destinar este tercio, puedes aprovecharlo para apoyar causas importantes para ti.
Conclusión
El tercio de libre disposición es una herramienta legal clave para personalizar la distribución de tu herencia. Representa la oportunidad de decidir sobre una parte significativa de tu patrimonio, dejando un legado a personas u organizaciones que son importantes para ti.
Sin embargo, para aprovecharlo, es esencial hacer un testamento. Planificar tu herencia no solo evita conflictos familiares, sino que garantiza que tus deseos se cumplan incluso cuando ya no estés presente.
Si necesitas orientación sobre cómo gestionar tu herencia o redactar un testamento, no dudes en contactar con un abogado especializado en sucesiones.